De seis a 10 kilos de blanco papel de 80 gr. fotocopiado por las dos caras. Tiritando quedaron los bosques cercanos...
La sensación de liberación se extendía por mis brazos cada vez que rasgaba unos pocos folios en dos, cuatro, ocho trozos irregulares... Rompía y rompía durante tanto tiempo que me olvidaba de prepararme la comida y no era consciente de la hora que era. Una gozada, vamos.
Entonces, quise que la cosa fuese todavía mejor... Y lo logré:
Papel mutilado y asesinos en serie: diversión asegurada
Ya le tenía muchas ganas a Dexter. El buen chico que es asesino en serie de malas personas... ¡cómo no me iba a caer bien!. Pulcro, ordenado, minucioso. Y siempre atento para complacer al "oscuro pasajero" según el Código de Harry. Un cielo...
Igual que el libro un par de días antes, la primera temporada cayó del tirón y sin sentirlo. Y mientras, yo diseccionaba cuidadosamente los párrafos de unos temas aún vivos en mi cabeza como si estuvieran atados con cinta transparente a la mesa limpia y recubierta de plastico de mi memoria reciente. En el futuro, me los volveré a estudiar, sin duda. Pero aquel día suplicaban detrás de su mordaza que no los rasgase... aunque yo lo tuviera que hacer como necesaria terapia de choque.
Pobrecito temario atrasado. Cómo sufrió... Pero cómo lo merecía...
2 comentarios:
Lo primero alabarte el gusto por Dexter. Luego, más halagos todavía por actualizar tan a menudo . Por último, me preocupas un poco, te imagino en la BatCueva rajando apuntes como un loco...y en todas las hojas de apuntes solo hay una frase repetida a lo largo de la hoja..."No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy" :-)
Nah, no es pa tanto...
Amás no tengo ningún hacha a mano...
La verdad es que fue un día muy satisfactorio: sillón relax, tele, chucherías, cocacola y destrucción.
De hecho, creo que mejoró mi salud mental... Un poco, al menos.
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