domingo, 27 de abril de 2008

Invasión

Los nervios y el mareo estuvieron a raya durante todo el trayecto sobre el Canal, pero el pájaro se metió en el infierno mismo cuando voló sobre Francia...

(Pueden abrir el cuadernillo de exámenes. Tienen tres horas de tiempo...)




Los traqueteos y el ruido casi eran lo de menos. Eran peores los gritos, el reflejo de las explosiones de los aviones alrededor, los haces de los focos, las líneas de trazadoras, el fuego, la incertidumbre, el humo...

Y que el objetivo de salto estaba muy por detrás de las líneas de antiaéreo...

(...jodé, estas preguntas de derecho de dónde las han sacao!!... ¿Cómo me voy a estudiar toda la Ley 13/2007, incluyendo la $%&a Disposición Adicional Segunda?... ¿Y de la Constitución cuándo preguntan?...)

Que no derriben el avión...
Que no reviente un motor...
Que no me atraviese una bala...
Que se abra el paracaídas...
Que no caiga en esa casa ardiendo...
Que no me rompa el cuello al aterrizar...
Que no me encuentre con una patrulla nazi de morros...

(El tiempo ha finalizado. Dejen de escribir y permanezcan en sus puestos mientras recogemos el exámen.)

Al final aquí estoy. En la Francia ocupada. He perdido mi bolsa de equipamiento durante el salto y estoy desarmado y perdido lejos de mi punto de encuentro previsto. Sólo espero haber tenido la suerte de caer cerca de mi pelotón y de acertar a encontrarlos. Espero que me contesten con un "Thunder" cuando yo diga "Flash"...

(Recapitulemos: El práctico creo que aprobado. El teórico con 28 seguras y 80 contestadas. Mi mayores problemas son mi estadística de aciertos y las leyes de probabilidad. Y, como dijo alguien ayer: la plantilla sólo puede dar alegrías, porque ya estamos todos en lo peor...")

La invasión no me ha matado todavía...

sábado, 26 de abril de 2008

Mensajes de apoyo

Cuando estaba a punto de embarcar me han entregado este mensaje:

La cartica: pincha para verla en más grande, verás qué bonica...

Es del Presidente. Nos lo dirige a los soldados, marinos y aviadores de la Fuerza Expedicionaria Aliada. Y dice, más o menos, lo siguiente:

"Estás a punto de embarcarte en la Gran Cruzada, para la cual nos hemos esforzado todos estos meses. Los ojos del mundo están sobre vosotros. Las esperanzas y las oraciones de la gente que ama la libertad en todas partes marchan con vosotros.
(...)
Vuestra tarea no va a ser fácil. El enemigo está bien entrenado, bien equipado y endurecido en batalla. Va a luchar salvajemente.
(...)
Pero la marea ha cambiado. Los hombres libres del mundo están marchando juntos hacia la victoria.
Tengo completa confianza en vuestro coraje y sentido del deber y habilidad en el combate. No aceptaremos nada menos que la victoria total.
Buena suerte. Y dejadnos pedir la bendición de Dios Todopoderoso para esta grande y noble empresa.

Firmado: Dwight D Eisenhower"

Tú también me has deseado suerte, también estás deseándome el éxito completo hoy. Lo sé, me lo has dicho, escrito o transmitido en la mirada.

Muchas gracias. Espero corresponder a la confianza.
Nos vemos en París, cuando esté ya liberado.

Un abrazo

viernes, 25 de abril de 2008

Víspera del día D

Mirame por ahí, entre mi pelotón, con el equipo listo y la pintura de camuflaje pero con la mirada perdida, disimulando los nervios, la impaciencia y el miedo indefinido como buenamente puedo.



Mañana es ese día que parecía que no iba a llegar nunca. Ese día para el que me he preparado a conciencia, y ese que he deseado alejar lo máximo posible en busca de un poco más de tiempo para estar perfectamente preparado.

...aunque soy muy consciente de que nunca se está perfectamente preparado para algo así...

Ahora, esta noche, la suerte está echada. No hay tiempo ni oportunidad de volver a subir el Currahee a paso ligero, ni de hacer más prácticas de tiro en unas maniobras. Tocará jugarse el pellejo con lo aprendido hasta hoy.

Así que ahora, en este Upottery en el que vivo, toca sólo tratar de acortar los tiempos: intentar dormir y descansar, cambiar de peinado, preparar el equipaje y los arreos, distraer una mente llena de datos (que, cuando llegue la hora de la verdad seguramente serán inútiles, pero que tengo atesorados como piedras preciosas), acordarme de lo luchado hasta hoy, mirar al cielo un momento a ver si aclara el tiempo...

...y preguntarme qué habrá sido de mi cuando llegue esta hora mañana...

lunes, 21 de abril de 2008

End of the season

A menos de una semana de la hora de la verdad, me he encontrado con esta maravilla:



There's so many emotions at the end of the season,
and nobody likes to talk about it.
But one of them is fear.
Fear that you've come this far, and it can all end.
The dream could die.
But me, I like the fear.
It means I'm close.
It means I'm ready.

Describe muy muy bien mi sensación actual y la actitud que estoy viviendo. Ahí está el miedo, la mezcla de nervios y agobio justo en la boca del estómago que me mantienen incómodo e inquieto cuando trato de aprovechar el último tiempo de pataleo.

Será porque sé que estoy cerca. Será porque estoy preparado para hacerlo lo mejor posible.

Esta semana va a ser muy larga y muy corta a un tiempo. Aunque después de llegar tan lejos, estoy deseando que llegue de una vez el final de la temporada.

Abrazo.