miércoles, 31 de enero de 2007

Final Round... Fight!

No sé si recuerdas a este caballerete.
"Mirame ahí abajo y sabrás por qué me rio... Juas, juas, juas..."

No sé si lo conoces siquiera ahora que caigo (desventajas de no saber quién está al otro lado...). Pero no te preocupes, que te refresco la memoria en un momentillo.

Su nombre es Bison. Mr. Bison. Es el último jefe del Street Fighter II (y sucesivos), es decir, el tío al que tenías que canear dos veces dos para acabarte el mejor juego de su tiempo, el que más dinero sacó de mis bolsillos y el que más tardes me mantuvo en casa de peleíllas con mis hermanos (salvándome varias veces el pellejo al no dejarme salir en agosto a la hora de la siesta...). Este no tiraba bolitas de energía. Para qué, si se podía recubrir de llamas mientras saltaba a por tí como un tornillo humano... Era el más rápido, el que más saltaba y llevaba una gorra de plato. Y ay de tí si lo pillabas cabreao, porque no te dejaba ni respirar.


Je, así el Bison pierde seguro...

Pues bien, hace poco yo "me llegué" a mi Mr. Bison. Y perdí el "round one!". De paliza, además. Pero siendo al mejor de tres, se puede remontar.

Hoy ha sido el "round two!". Y he ganado yo... Me ha costado trabajo, no te creas, pero he acabado con más de media vida y en el límite del tiempo. Así que hoy estoy ple-tó-ri-co...

Y ahora viene el "Final Round!". Acabará el martes. En este combate me juego ver el final feliz de todo este despropósito de tiempo (peleas, palizas, viajes, derrotas, insert coin to continue...) o la vuelta a empezar más frustrado, más nervioso y cinco duros más pobre. Pero creo que, por muy castigado que acabe, esta vez el malo muerde el polvo. Así que...

Final Round!
FIGHT!

domingo, 28 de enero de 2007

Gracias por la venda...

Es pura intuición. Algo te dice en tus tripas que deberías moverte porque va a pasar algo que no debería. Pero es tarde: Impacto. En realidad sólo duele el orgullo, porque no queda bien que te den un bolazo de nieve en el culo cuando estás agachado recogiendo munición...

...ayer no pude parar de acordarme de esta tira...

El frío del ambiente favorece la curación, porque muchos bichitos malos tienen demasiado frío como para dedicarse a infectar. Pero el calor humano también favorece la curación, porque da una fuerza especial a la persona que se cura. Ni que decir tiene que este fin de semana he disfrutado mucho de ambos...

Y puede que no supieras nada de mi herida, o del tratamiento que tomo todos los días, o de esos cuidados que necesito para volver a estar sano, pero lo has hecho bien. Te ha salido un vendaje perfecto, sólo quería que lo supieras.

Contra fuertes separados, brazos fuertes o incursiones por el flanco.

Habrá una próxima vez, las distancias se harán cero y otro chute de cariño, baile y copas. Directo a vena.

Besos. Abrazos. Planes de futuros encuentros.

jueves, 25 de enero de 2007

¿Poder mutante?

Ya es un clásico. A la altura de los poderes de araña radiactiva, o la hipervelocidad, o la telekinesis. Es el factor de curación de Logan, el que hizo posible que un chiquitín borde y peludo, en danza desde la Segunda Gran Guerra, se convirtiera en un Arma-X con garras retráctiles y esqueleto de adamantium. Y encima dice que es el mejor en su trabajo...

"...me pica un poquillo la espalda..."

Pero no venía yo a hablar del zagal este (al que, como mucho, me parezco en el pelo del pecho) sino de este factor de curación que me he apropiado por el morro para curarme cuando tenga pupita vital.

Quiero que este intento, esta bitácora con final cierto pero espero que lejano, actúe como mi factor de curación, que me permita regenerar células maltrechas al aporrear un teclado con más o menos gracia. No lo hago porque necesite comunicarme con el mundo. No lo hago para satisfacer mi hambriento ego. Ni porque crea tener muchas cosas interesantes que decir. Y para colmo, supongo que la mayoría de los días escribiré sin el más mínimo ingenio...

Mis razones para hacerlo son múltiples: mantener cierta disciplina, ejercitar mis diez deditos, provocar algún comentario de los que me conocen como tú, dejar constancia de algunas cosas que me vayan pasando, desfogar las tonterías que ronden por mi cabeza, sorprender, adormecer miedos, echar una mano en lo que sea si se tercia, alegrar, aliviar discursos rollazo de mi cabeza, experimentar con letras de casera, compartir algún hallazgo, despertar sonrisas, construir pamplinas en el aire, aburrir a veces, sentirme bien...

Al final, creo que se reduce a eso: escribir me hace sentir bien conmigo mismo. Es algo que me hace sentir cómodo, ágil, poderoso, vivo...

Si alguien conoce mejor forma de curarse de apatía y de inseguridad, que lo diga.

miércoles, 24 de enero de 2007

Diagnóstico

No recuerdo bien el contexto ni la historia a la que daba lugar, pero leí una vez en algún sitio que, hace tiempo, los mejores médicos eran los que eran capaces de poner nombres a las enfermedades. Porque si eras capaz de nombrarlas sabías el tratamiento que podía curarlas.

Supongo que por eso en todos los capítulos de House hay algún momento en el que la cobaya humana de turno es muy probable que tenga lupus, la criatura.

"...te voy a curar aunque sea a palos, desgraciao..."

Con las posesiones infernales creo que pasa igual (creo... porque sólo he visto el exorcista y yasstá, gracias). Sólo cuando se conoce el nombre del demonio que ha "okupado" a la niñita inocente le puedes llamar por su mote del colegio y pedirle amablemente (con más o menos voces, crucifijos y efectos lumínicos, quiero decir) que haga el petate y que mejor se vaya de alquiler con otros tres colegas opositores para el cuerpo superior de torturadores en el segundo círculo del infierno, con los lujuriosos, que es lo que mola...

"...mira, Azraelín, que nos conoceeeemos... Salte por las buenas, que si nooooo..."

¿Que a qué viene todo esto?
A que ahora conozco mi enfermedad. A que sé cómo se llama mi demonio.

Ya tengo OTRO factor de curación...

viernes, 19 de enero de 2007

Empecemos...

Ejem...

¿Estamos todos ya?

Pues empecemos con el himno:



Do you have the time
To listen to me whine
About nothing and everything
All at once
I am one of those
Melodramatic fools
Neurotic to the bone
No doubt about it

Sometimes I give myself the creeps
Sometimes my mind plays tricks on me
It all keeps adding up
I think I'm cracking up
Am I just paranoid?
Or I'm just stoned

I went to a shrink
To analyze my dreams
She says it's lack of sex
That's bringing me down
I went to a whore
He said my life's a bore
So quit my whining cause
It's bringing her down

Sometimes I give myself the creeps
Sometimes my mind plays tricks on me
It all keeps adding up
I think I'm cracking up
Am I just paranoid?
Uh, yuh, yuh, ya

Grasping to control
So I better hold on

Sometimes I give myself the creeps
Sometimes my mind plays tricks on me
It all keeps adding up
I think I'm cracking up
Am I just paranoid?
Or I'm just stoned

Y ahora, te traduzco (libremente) lo importante. Para que sepas de qué va esto:
¿Tienes tiempo para escucharme lloriquear sobre nada y sobre todo a la vez?
Soy uno de esos capullos melodramáticos, neuróticos hasta la médula, no hay duda.
A veces me doy escalofríos a mi mismo. A veces mi mente juega conmigo.
Todo se continúa acumulando. ¿Estoy paranóico o sólo colocado?

Ansioso por controlar(me). Así que mejor me agarro bien...

Así que ya sabes. Agárrate bien.
Nota:
La parte de la falta de sexo, de la psicóloga y de la puta las dejamos para otra ocasión, ¿vale?