viernes, 7 de septiembre de 2007

La bella y graciosa moza...

Hace ya mucho tiempo que conocí a esta bella y graciosa moza.

No recuerdo bien el momento, pero yo no era más que un chavalito, uno de esos que son más ingenuos y tímidos de lo recomendable para su edad. Un día cualquiera, alguien me habló de ella y sus compañeras de forma casual. Inmediatamente me interesé, porque resultó que yo ya conocía a parte de su familia desde hacía un tiempo (gracias a mi mami) y eran increíbles, así que hice lo posible por conocerla. Cuando llegó el día, y a pesar de que al principio no entendía bien sus risas sin motivo, capturó mi atención desde que escuché su historia completa, incluso a pesar de que estaba oyendo muchas buenas historias aquella tarde. Me encantó su candor, su actitud hacendosa y cumplidora, su forma de cantar alegremente, su velocidad y destreza aferrando a su mascota huida... Y por eso mismo me cayó gordo gordo el tipo de altivo porte que la pretendía...

Llevo con ella mucho tiempo y me ha hecho pasar muy buenos ratos muchas veces. Siempre me hace reír, casi como el primer día incluso a pesar de conocer su historia de memoria. Y sigue siendo tan bella y graciosa como siempre ha sido mientras lava la ropa en el arroyuelo.

Deja que te la presente:


Tiene muchas hermanas y todas merecen la pena. Porque sus padres son genios. Son los únicos artistas por los que he sido capaz de esperar (dos veces dos) unas 6 horas de cola delante de la taquilla de un teatro y son los únicos que estando en un escenario han hecho que mi padre se preocupara por mi porque no era capaz de respirar en medio de un ataque de risa. Son los que transforman en fans irredentos al 90% del público que tiene la suerte de verlos en directo. Un vicio para viciosos profesionales como Xtremo y Lunita. Una cura natural e inteligente a la bajeza de ánimo y la apatía vital.

Por eso siempre que me apetece reírme un ratito y tiro de clásicos, como esta tarde, recurro a ellos.

¡¡Larga vida a Les Luthiers!!

(Por cierto, nota anecdótica. Ahora mismo juraría que quien me la presentó fue el mismísimo Tete en una cinta de cromo de 90 que se oía de pena, grabación de grabación de grabación hasta el infinito. Lo que sí recuerdo claramente es que era la última de la cara A. ¿Es curioso o no es curioso esto de la memoria selectiva?...)

2 comentarios:

Cincibastro dijo...

Que grandes!

Tengo que reconocer que en cinta nunca me parecieron lo mismo, es como solo escuchar a Groucho Marx sin verle las caras que pone cuando suelta una detras de otra y no puedes parar de partirte.

El Tete dijo...

Casualmente estos días le estoy presentando a mi novia esta moza y sus hermanas.

Los DVDs no bajan de precio ni a l de tres, así que tiro de mula.